viernes, 15 de septiembre de 2017

LOS CAMBIOS


Se parecía a Carlitos Gardel, después de la caída del avión. Lo vi hace 30 años, y es como si lo estuviera viendo. Tosía, ajustaba el nudo del pañuelo que le protegía el pescuezo. El pañuelo había sido blanco alguna vez.

—¡Yo no vendo nada! —roncaba.

Trabajaba parado sobre un cajón, frente a la Caja de Jubilaciones de Montevideo. En las manos sostenía una caja de cartón, atada con piolines desflecados como él.

—¡Yo no vendo nada!

Algunos curiosos se acercaban, todos viejos y muy viejos. Poquito a poco, los curiosos se iban haciendo gentío.

—¡Yo no vendo nada!

Y cuando llegaba el momento, dos brasas se encendían en el fondo de sus ojeras cavernosas. Con ampuloso gesto se quitaba el sombrero y lo arrojaba al piso. Y alzando la caja de cartón, la ofrecía a los cielos:

—¡Yo no vendo nada, señoras y señores! Porque esto... ¡no tiene precio!

AGUA ESTANCADA


jueves, 14 de septiembre de 2017

FLORECIMIENTO


Éxtasis
Moksha 
Transformación 
Sannyas (movimiento de los buscadores de la verdad)

La sannyas no puede categorizarse. No es una categoría. Es de una cualidad de ser tan diferente que no existe categoría para ella. No se la puede analizar, no se la puede separar en fragmentos. No es un mecanismo: no pue­des desarmarlo, separar las piezas y volver a juntarlas. No; es una unidad orgánica. Si la ana­lizas, deja de estar allí y ya nunca podrás volver a armarla; es imposible. La sannyas es una fuer­za vital: orgánica, igual que una flor. Analiza la flor, sácale cada pétalo, arráncalo, examínalo, quédate satisfecho por haber investigado y, después, intenta volver a armar la flor. Para en­tonces, la flor ya no existe, los pétalos han muerto y jamás se los podrá volver a colocar en la misma forma, porque no era un mecanismo; era una unidad orgánica.

Sannyas es un florecimiento, un florecimien­to de la conciencia humana: así como las flores que nacen en un árbol muestran que el árbol ha llegado a un acabamiento y que, más tarde o más temprano, los frutos surgirán. Las flores son sólo indicadores de que el árbol está pre­parado para dar frutos. El árbol está listo, está satisfecho. Las flores son como el éxtasis que el árbol experimenta antes de empezar a dar fru­tos: porque la fruta da cuenta de la satisfacción. El árbol ha llegado a su punto máximo, a su clímax; ha llegado al crescendo de su ser. Está feliz, lo disfru­ta (su vida no fue inútil: ahora vendrán los frutos). El árbol se siente extático y da flores.

LA VIDA SIGUE SU CURSO


miércoles, 13 de septiembre de 2017

¿EL BUDISMO ES UNA RELIGIÓN? ¿BUDA ERA UN DIOS?


P: ¿Cuál es la esencia del budismo? ¿Es una religión? ¿El Buda era un Dios?

Thich Nhat Hanh
R: El Buda siempre nos recuerda que es un ser humano, no un Dios. Es un maestro. Nos dejó muchas enseñanzas que impartió a sus discípulos. Se llaman sutras. Esta mañana les he ofrecido la práctica de la meditación consciente. Viene del sutra denominado Discurso sobre la respiración consciente. En este texto nos propone dieciséis ejercicios de respiración consciente para enfrentar a las dificultades de nuestra vida cotidiana, cultivar la sabiduría, la compasión, etc. Hay otras enseñanzas sobre la práctica de la consciencia plena que conducen a la transformación y la sanación. No son oraciones; son textos que enseñan a aceptar el sufrimiento y las dificultades de la vida cotidiana.

Al principio, el budismo no era una religión; era un modo de vida. Los sutras son las enseñanzas del Buda acerca de cómo transformar el sufrimiento y cultivar la alegría y la compasión. Como monjes budistas, aprendemos mucho de estos sutras y aprendemos a explicarlos a la gente de forma que sepan exactamente cómo practicar estas enseñanzas.

En la tradición budista, honramos los tres tesoros. El primer tesoro es el Buda, quien halló un camino de entendimiento, amor, transformación y sanación. El segundo tesoro es el Dharma, el camino de la transformación y la sanación, ofrecido por el Buda en forma de discursos, enseñanzas y prácticas. El tercer tesoro es la comunidad de practicantes, la sangha, los hombres y mujeres que han formado una comunidad y siguen el camino de la meditación y la práctica consciente.

Sangha significa «comunidad». Todos los miembros de la comunidad practican la respiración consciente, el caminar consciente, y generan compasión y entendimiento. Practicamos el tomar refugio en la sangha porque una verdadera sangha es una comunidad donde existe una práctica verdadera, consciencia, entendimiento, y compasión verdaderos. Una verdadera sangha es portadora del verdadero Dharma y del verdadero Buda. Por tanto, cuando se acercan a una Sangha verdadera, se acercan al Buda y al Dharma.
Related Posts Plugin for WordPress, Blogger...