Para la mayoría de los humanos el único respiro de sus mentes que encuentran ya, es pasar ocasionalmente a un nivel de conciencia por debajo del pensamiento. Todo el mundo lo alcanza todas las noches durante el sueño. Pero también ocurre hasta cierto punto a través del sexo, el alcohol y otras drogas que suprimen la actividad mental excesiva. Si no fuera por el alcohol, los tranquilizantes, los antidepresivos así como las drogas ilegales, que son todos consumidos en grandes cantidades, la demencia de la mente humana sería aún mucho más evidente de lo que lo es ya. Creo que si fuera privada de sus drogas, una gran parte de la población se convertiría en un peligro para ella misma y para los demás. Estas drogas, por supuesto, simplemente mantienen atascadas a las personas en la disfunción. Su uso extendido sólo dilata la quiebra de las viejas estructuras mentales y la emergencia de una conciencia más alta. Aunque los consumidores individuales pueden encontrar cierto alivio de la tortura diaria que les inflige su mente, la droga les impide generar suficiente presencia consciente para elevarse por encima del pensamiento y encontrar así la verdadera liberación.
Volver a caer en un nivel de conciencia por debajo de la mente, que es el nivel de pre-pensamiento de nuestros ancestros distantes y de los animales y las plantas, no es una opción para nosotros. No hay forma de dar marcha atrás. Si la raza humana ha de sobrevivir, tendrá que avanzar al siguiente nivel. La conciencia está evolucionando en todo el universo en billones de formas. Así, incluso si no lo lográramos, no importaría en una escala cósmica. Nunca se pierde una ganancia en conciencia, así que simplemente se expresaría a través de alguna otra forma. Pero el mismo hecho de que yo esté hablando aquí y usted esté escuchando o leyendo esto es un signo claro de que la nueva conciencia está ganado terreno en el planeta.