Antes de acercarte a alguien para reconciliarte, debes alimentarte con el néctar de la compasión. La compasión nace de la comprensión, de comprender que la otra persona también sufre, algo que tendemos a olvidar. Sólo vemos nuestro sufrimiento y lo exageramos pensando: «Nadie sufre como yo; soy el único que sufre tanto». Pero con una comunidad que te apoye, podrás observar la situación con más profundidad y ver que la otra persona también sufre muchísimo.
Podría ser que al no haber tenido la otra persona suficiente apoyo, no pudiera progresar en el camino de la práctica, y que tú tampoco la hubieras ayudado. Acaso ni siquiera seas capaz de ayudarte a ti mismo. Pero las enseñanzas son precisamente para esto, para alimentarnos con el néctar de la compasión. Hemos de pedir al Dharma, a la sangha, que nos ayuden. El Dharma es eficaz aquí y ahora.
Extracto del libro:
LA IRA (El dominio del fuego interior)
Thich Nhat Hanh
Thich Nhat Hanh
Fotografía de Internet
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
¡aho! Gracias comentar.
Nota: sólo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.