La ley de la Gravedad no es responsable de que la gente caiga enamorada.
(Albert Einstein)
La teoría Triangular del Amor, formulada por Robert Stenberg, afirma que este sentimiento tiene tres componentes esenciales: pasión, o el deseo de estar con la otra persona; intimidad, o la capacidad de compartir nuestros pensamientos con el otro; y compromiso, o la certeza de que esa persona no nos dejará de lado.
Estos componentes dividen el amor en seis clases, dependiendo de cómo se combinen entre sí:
– Amistad: solo existe la intimidad.
– Encaprichamiento: solo hay pasión.
– Amor vacío: la pasión y la intimidad no existen y solo queda el compromiso.
– Amor fatuo: solo existen la pasión y el compromiso.
– Amor romántico: sus ingredientes son la pasión y la intimidad.
– Amor sociable: relación en la que ha desaparecido la pasión, pero quedan la intimidad y el compromiso.
– Amor completo —o ideal—: el que cuenta con las tres características; es también el más difícil de mantener y tiende a convertirse, con el tiempo, en uno de los anteriores.