Sannyasin
Renacimiento
Automatización
Eficiencia
Desatención
Conciencia
Vuélvete un sannyasin, alguien inocente, renacido, limpio, que se mete momento a momento en lo desconocido. Entonces, podrás compartir.
Todo el proceso de la educación del hombre, la cultura, los condicionamientos van en sentidos opuestos: se te enseña cómo ser astuto y hábil. Se te enseña lo mental, nunca se te transmite la inocencia. Se te enseña la automatización (debes recordar esta palabra), se te hace cada vez más automático, pues entonces te vuelves cada vez más eficiente.
Aprendes a manejar: al principio, es difícil. La dificultad no está en el manejo, ni en el coche, ni en ninguna otra cosa. La dificultad está en ti, pues debes estar alerta. Al principio, tienes que estar alerta; el peligro está latente. Debes ser consciente todo el tiempo de lo que haces. Tienes que prestar atención al tránsito, a la gente que pasa, al mecanismo; tienes que prestar atención al embrague, a la velocidad, al volante y a todo. Debes prestar atención a tantas cosas, que tu mente no puede continuar su rutinario monólogo interior. Debe prestar atención. Esto genera el problema.









