Cuando hagas tonglen en el lugar mismo, simplemente inspira y espira, tomando el dolor y enviando alivio y amplitud.
Cuando se practica tonglen como práctica meditativa formal, tiene cuatro etapas:
1. En primer lugar, descansa la mente brevemente, durante un segundo o dos, en un estado de apertura o quietud. A este estadio se le llama tradicionalmente vislumbrar la bodhichitta absoluta o abrirse repentinamente a la amplitud y claridad básicas.
2. Segundo, trabaja con la textura. Inspira una sensación caliente, oscura y pesada —una sensación claustrofóbica— y espira una sensación fresca, brillante y ligera, una sensación de frescura. Inspira completamente, a través de todos los poros de tu cuerpo, y al espirar irradia completamente, a través de todos los poros de tu cuerpo. Repítelo hasta que sientas el movimiento sincronizado con tu inspiración y espiración.
3. Tercero, trabaja con una situación personal, cualquier situación dolorosa que sea real para ti. Tradicionalmente se empieza haciendo tonglen por alguien que nos importa y a quien queremos ayudar. Pero si te sientes atascado como he descrito antes, puedes hacer la práctica por el propio dolor que estás sintiendo y simultáneamente por todos los que sienten algún tipo de sufrimiento parecido. Por ejemplo, si te sientes inadecuado, inspira esa sensación por ti mismo y por los demás que están en el mismo barco, y envía una sensación de confianza y adecuación, o el tipo de alivio que desees.