En la vida no gana el más fuerte sino el que resiste más. Esta fábula puede ser útil:
Para llegar al mundo maravilloso de la Geometría solo hay dos caminos: una línea recta y un laberinto. La línea recta está llena de obstáculos; los caminos del laberinto se ven limpios y bien pavimentados… Cierto día un cubo y una esfera decidieron competir en una carrera. El primero dijo: “¡Como soy un cubo inteligente, elijo el laberinto!”. La segunda dijo: “¡Como soy una bolita imperfecta, elijo la línea recta!” ¡Comenzó el torneo! La esfera rodó velozmente por la línea recta pero al poco tiempo encontró toda clase de cosas que la frenaron. Le costó un enorme trabajo avanzar. En cambio el cubo se deslizó como trineo por por las suaves avenidas del laberinto, pensando:”¡Bolita tonta: no se dio cuenta que la distancia más corta entre dos puntos no es una línea recta sino la trayectoria de menos resistencia!”