Todavía estás en la orilla del sufrimiento y la ira. ¿Por qué no la abandonas y vas a la otra orilla, a la de la no-ira, de la paz y la liberación? Allí es mucho más agradable. ¿Por qué has de pasar varias horas, una noche o incluso varios días sufriendo acosado por la ira? Hay una barca que te permite ir rápidamente a la otra orilla. Esta barca es la práctica de volver a nosotros mismos, mediante la respiración consciente, para observar profundamente nuestro sufrimiento, nuestra ira y nuestra depresión, y sonreírles. Al hacerlo, venceremos al dolor e iremos a la otra orilla.
No sigas en esta ribera ni continúes siendo víctima de tu ira.